Seguramente si eres mayor de 40 años, estas palabras te sonaran bastante. Más del 40 % de la población española padece esta dolencia, que consiste en una disminución de la capacidad de enfoque del ojo que provoca una pérdida de nitidez en la visión cercana.
Esta sintomatología se debe a que la lente natural del ojo o cristalino, sufre una pérdida de elasticidad. Esta lente que cumple la misma función que el zoom de una cámara fotográfica cuando pierde elasticidad también pierde capacidad de enfoque. Esto provoca que se vaya aumentando la distancia a la cual el ojo puede enfocar, catalogándose de vista cansada cuando esta supera los 33 cms.
Es una afección muy común entre personas de media y avanzada edad. Así que sus síntomas son muy conocidos. A continuación describimos los más comunes:
- Separar demasiado lo que se está leyendo para poder enfocarlo o en caso de que seamos miopes, vernos obligado a prescindir de las gafas para poder leer de cerca.
- Recurrir a una mayor cantidad de luz para poder tener una lectura más cómoda.
- Dolores de cabeza e incluso mareos.
Para corregir los problemas de vista lo mejor es acudir a nuestro oftalmólogo y que éste nos indique los parámetros de visión que tenemos para que nos hagan unas gafas a medida. Existen tres tipos de gafas según las necesidades de cada paciente:
- Bifocal: se utiliza para corregir la vista de lejos y de cerca.
- Trifocal: para el enfoque de lejos, media distancia y de cerca.
- Progresiva: en este caso la parte superior del cristal se utiliza para corregir la vista de lejos, la inferior para la de cerca y la de en medio posee una graduación progresiva abarcando todas las distancias.
En el caso de que no queramos usar gafas podemos someternos a una cirugía. Normalmente los casos en los que se realiza una intervención quirúrgica son aquellos en los que la presbicia está asociada a cataratas, miopía o hipermetropía. Dependiendo de la sintomatología del paciente y de sus necesidades existen diferentes tratamientos de cirugía láser:
- Lentes intraoculares monofocales: éstas sustituyen al cristalino para corregir la monovisión, o lo que es lo mismo, para evitar que un ojo se especializa en la visión de cerca y otro en la de lejos.
- Lentes acomodativas: su misión es conseguir una buena visión para todas las distancias. Los resultados de estas lentes son variables y dependen mucho de las características del ojo.
- Lentes multifocales: utilizan un diseño óptico parecido al de las gafas progresivas.
- Lentes que se implantan sin extraer el cristalino: pueden ser bifocales o multifocales. En esta opción los resultados son limitados pero suponen un gran avance de cara al futuro.
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